La humildad llevará al Deportivo al objetivo

Breogán Blanco

TORRE DE MARATHÓN

César Quian

28 abr 2024 . Actualizado a las 21:40 h.

El Deportivo se presentaba al partido con dos interrogantes. El primero residía en cómo sentiría la presión del Barcelona Atlètic tras la sorprendente victoria (por lo abultado) en Ponferrada del principal perseguidor del líder. El segundo residía en el comportamiento del entrenador de porteros rival, primicia durante toda la semana, exagerando, como si Paco Liaño se pusiese los guantes esta semana para defender la portería de los de O Carballiño. Porque, sin desmerecer al gran Paco, Diego Rivas jugó hace nada, el año pasado, en Primera Federación en un equipo que logró el ascenso directo.

Volviendo al partido, Idiakez sigue fiel a su 1-4-2-3-1 asimétrico con Lucas jugando libre y Paris Adot en el lateral derecho. El equipo herculino salió con tranquilidad, algo a tener en cuenta debido a la situación. Bien es cierto que Mella adelantó al Deportivo en los primeros minutos. Tal y como sucedió en la primera vuelta, me gustaría recalcar las variantes en la propuesta del equipo ourensano, repitiendo prácticamente su planteamiento de hace pocas semanas en la Ciudad Condal: bloque medio-bajo a pesar de ir perdiendo, sólidos defensivamente y a la espera de su momento para transitar, aprovechar el balón parado o proponer combinativo, sin complejos.

La diferencia con respecto a ese partido es que el equipo de Idiakez defiende en bloque bajo si el rival supera su presión alta. Sin rubores, como el conjunto más sólido de la categoría, hasta ahora. Eso y que Diego Villares se inventó una obra de arte desde 30 metros, otro gol con sello de Abegondo, antes de que el cuadro de Javi Rey recortara distancias a la salida de un córner. Todo el acierto del que se presumía al inicio del encuentro faltó en las transiciones deportivistas durante la segunda parte, y en el descuento el Arenteiro empató en la salida de otro córner. La semana pasada hablaba sobre la situación de privilegio, en cuanto a clasificación, del Deportivo y en cómo debía actuar su entorno para no lanzar las campanas al vuelo. Menos calculadora y más sentimiento del día a día. Tal y como decía la madre Teresa de Calcuta, «si eres humilde, nada te puede dañar, ni los elogios ni la vergüenza, porque sabes lo que eres». Uno menos.