El filial deportivista tendrá que certificar la salvación en la última jornada y los granates ya solo serán segundos
28 abr 2024 . Actualizado a las 16:51 h.El Pontevedra CF es un especialista en complicarse la vida. Tras una temporada impecable en la que se mantuvo líder buena parte de ella, tiene que ser en la recta final donde haga sufrir a sus aficionados hasta el último minuto.
A dos partidos de que expire el campeonato, Yago Iglesias confió en el equipo de siempre para aguarle la fiesta de la permanencia al filial deportivista. Una victoria del Fabril le permitiría haber certificado de forma definitiva la salvación sin tener que esperar ahora a la última jornada. Enfrente estaba un Pontevedra CF, que sabiendo lo que se jugaba, no acabó de desplegar la contundencia que debería. Faltó hambre. Y no hubo comilona. Otra vez los errores lo condenaron de principio a fin. Un gol de Pereira fruto de una imprecisión granate abrió el marcador. Edu Sousa despeja un saque de falta, pero el rechace es aprovechado por el Fabril para ponerse por delante.
La respuesta de los pontevedreses llegaría apenas diez minutos después tras varios intentos previos de Toño, que esta vez sí, dio la asistencia a Chiqui tras ceder al segundo palo después de que Yelko iniciase la jugada del gol. El empate dio calma a un Pontevedra CF, que enfiló el túnel de vestuarios con muchos aspectos a cambiar de cara a la segunda parte. El partido estaba abierto para ambos, pero no se podía esperar al final.
Pero lejos de ganar en agresividad, en la reanudación la tónica granate no cambió y el partido siguió igual sin apenas presión en las salidas de balón y dejando hacer a los locales. La primera la tuvo el Fabril, que hasta levantó a los aficionados de la grada pensado que el balón se había colado dentro de la malla. El partido se le complicaba aun más a un Pontevedra que no reaccionó hasta mediada la segunda parte.
La lluvia dio paso al sol y en el terreno de juego los granates empezaron a sacudirse esa nube negra que los tuvo atenazados hasta ese momento. Y las acciones de gol llegaron. Primero con un lanzamiento de Dalisson que interceptaba Ríos y poco después Bastos lanzaba al palo y el rechace se iba de nuevo a manos del portero. El encuentro incrementó el ritmo y Yago Iglesias reforzó el ataque con la entrada de Rufo, Borja Domínguez y Gueye. Los granates comenzaban a generar peligro, pero los de Óscar Gilsanz se cerraron bien atrás y fueron capaces de asustar al contragolpe con una acción de Jairo que se quedó solo ante Edu Sousa. Cuando el reparto de puntos ya estaba casi asegurado, llegó la hora fatídica para los granates: el último minuto. Un saque de córner de Diego Gómez clavó a Edu bajo palos y vio como se esfumaban las opciones de remontar. Sin embargo, en el tiempo de descuento, un cabezazo de Mario Gómez equilibró de nuevo el partido con un empate que no vale a nadie.
El Fabril tendrá que ganar el próximo partido o al menos esperar que no lo hagan ni la Gimnástica, el marino de Luanco o el Avilés para evitar el descenso y el Pontevedra CF tendrá en Pasarón un mero trámite después de que ganase el Ourense al Oviedo Vetusta. A los de Yago Iglesias les toca pensar ya en una fase de ascenso en la que no valdrán jornadas como las de este domingo.